“Todo lenguaje, sin excluir al de la libertad, termina por convertirse en una cárcel; y hay un punto en el que la velocidad se confunde con la inmovilidad” Rubén Darío
Somos hombres y mujeres no ángeles, las sensaciones son subjetivas e indecibles
Así como el poema, organismo verbal productor de silencios
El encuentro de nuestros cuerpos nos conduce a los más hondos silencios
Nos refugiamos en ellos para retornar a nuestra forma original
Después de haber sido una y todas las formas del mundo
Después de anularme y encontrarme en tu cuerpo infinito
Después de experimentar la sensualidad más directa, y el erotismo más sagrado
Llega el reposo, el retorno a la esencia
La contemplación del cuerpo deseado
Se apodera del espacio una blanca ternura
Envuelta por el transparente silencio…
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